La homeostasis o mantenimiento de la constancia del medio interno, requiere la comunicación entre células y órganos ampliamente separados. Esta comunicación se consigue a través de la interacción coordinada de los sistemas nervioso, endocrino e inmunes. El estudio de esta interacción coordinada constituye el campo de la neuroendocrinología que abordaremos en este tema. Las manifestaciones neurológicas de las enfermedades endocrinas son muy variadas y pueden afectar el sistema nervioso central y periférico. En ocasiones de deben a un déficit en la función glandular mientras que en otros casos la causa es una hiperfunción.