El diagnóstico de epilepsia, la recurrencia de crisis epilépticas y el tratamiento anticrisis van a influir en la calidad de vida del paciente, por lo que conviene evaluar apropiadamente el balance riesgo-beneficio del tratamiento. En la elección de fármacos anticrisis, hay que tener en cuenta, además, su mecanismo de acción y características farmacocinéticas para adecuar el tratamiento al perfil del paciente. A pesar de ello, cerca de un tercio de los pacientes no van a conseguir libertad de crisis, considerando el fracaso de al menos dos fármacos adecuadamente prescritos y tolerados como una epilepsia farmacorresistente. En estos casos, hay que recurrir a una combinación de fármacos, intentando potenciar sinérgicamente la eficacia y minimizando los posibles efectos adversos. Conviene valorar la posibilidad de otras terapias, principalmente quirúrgicas, en una unidad especializada. Para ello, tras un estudio previo, disponemos de cirugías resectivas con intención curativa, recurriendo a la cirugía temprana en determinados casos o a estudios más invasivos, en otros; cirugías desconectivas o terapias más paliativas como la neuroestimulación, poniendo siempre como objetivo la mejora de la calidad de vida de estos pacientes.

The diagnosis of epilepsy, the recurrence of epileptic seizures, and antiseizure treatment will influence a patient's quality of life. Therefore, it is advisable to appropriately evaluate a treatment's risk-benefit analysis. When choosing antiseizure drugs, the mechanism of action and pharmacokinetic characteristics must be taken into account in order to adapt the treatment to the patient's profile. Even in spite of this, nearly one-third of patients are not going to be seizure-free, with the failure of at least two adequately prescribed and tolerated drugs defined as drug-resistant epilepsy. In these cases, it is necessary to resort to a combination of drugs, attempting to synergetically promote efficacy and minimize possible adverse effects. It is advisable to evaluate the possibility of other therapies—mainly surgical—in a specialized unit. After a prior study, there is resective surgery with curative intent, resorting to early surgery in certain cases or to more invasive studies in other, as well as disconnective surgeries or more palliative therapies such as neurostimulation, always with the aim of improving these patients’ quality of life.